LA MÚSICA
La selección de las actividades musicales en la infancia es algo que debe ser cuidadosamente estudiado. Debemos partir de unos adecuados criterios pedagógicos para seleccionar las condiciones ambientales más propicias de manera que se potencie no sólo el desarrollo de las habilidades musicales, sino también el de las cognitivas, afectivas o lingüísticas.
Con la música se mejora la orientación espacial y temporal, la socialización, la creatividad, la espontaneidad, la perseverancia, la confianza en uno mismo, la concentración, la seguridad, la atención, la adquisición del esquema corporal y, según fundamentados estudios, también la memoria verbal de los niños. En definitiva, la capacidad de aprendizaje.
EL ARTE
Dentro de las afirmaciones que aparecen en estos artículos se sostiene que el arte estimula la capacidad de aprendizaje, dado que a través de éste se trabajan habilidades diferentes a las de tipo lógico – matemáticas sobre las cuales está basada la educación tradicional.
Se ha acumulado evidencia acerca de que el arte ayuda al aprendizaje en áreas específicas tales como lectura, escritura y creatividad. Se plantea incluso que el pensamiento creativo se desarrolla naturalmente a través de las artes, y en caso de ser estimulado a temprana edad, tiende a permanecer durante largo tiempo en el individuo y puede ser aplicado a diferentes ámbitos de la vida.